DEDALERA                           
Foxglove (in) Fingerhut (al) Digitale (fr)
Digitalis sp.

Bajo el dominio de Venus, la dedalera o digitalis se llama también "sombrero de la gente menuda", porque las hadas usan sus flores para adornarse. Se dice también que las manchas que tienen las flores indican por donde pasaron los duendes del jardín. Su nombre digitalis le fue otorgado por Leonhard Fuchs en el siglo 16 cuando se le conocía por el nombre vulgar de dedalera (del alemán Fingerhut) y el lo convirtió al latín digitalis (de Digitabulum, dedal en latín). El nombre en inglés Foxglove, uno de los más antiguos para nombrar esta planta (siglo XIV),alimenta la leyenda de que las hadas malas les entregaban las flores a los zorros para que se las pusieran de guantes de modo que no se escucharan sus pisadas cuando entraban al gallinero.

La dedalera fue muy usada por los antiguos herbalistas para tratar distintas enfermedades, especialmente por su uso diurético en el tratamiento de edemas y externamente para la cicatrización de heridas. Recién en 1650 se introdujo en la farmacopea londinense.

CULTIVO
De la familia de las escrofulariáceas, la dedalera es una planta herbácea bianual. Durante el primer año forma una roseta de hojas aovadas y afieltradas de la cual al año siguiente nace  una vara floral  en racimo con flores en forma de dedal, de allí el nombre dedalera. Algunas veces la raíz se ramifica (se recomienda podar la vara floral antes de que produzca la semilla) y la misma planta da durante varios años nueva floración. Es muy mielífera. Cada flor dura alrededor de seis días y una sola planta de digitalis puede producir entre uno y dos millones de semillas. Se auto siembra con facilidad. Las semillas son minúsculas, café y vienen dentro de una cápsula. Crece bien en suelos arcillosos mezclados con arena, con buen drenaje y ojala con algo de sombra.  Necesita mucha humedad ambiental y riego continuo. Se cultiva comercialmente para la extracción de la digitoxina (que no ha podido hasta el día de hoy sintetizarse en el laboratorio). Un kilo de semilla sembrará una superficie de un acre. Un acre (4,000 metros) de buena tierra producirá aproximadamente dos toneladas de follaje (o 500 kilos de hojas secas.

CONSTITUYENTES QUÍMICOS
Contiene cuatro glucósidos importantes de los cuales tres son estimulantes cardíacos. El más potente es la digitoxina una droga muy venenosa a acumulativa, no soluble en agua, Otro glucósido es la digitalina, cristalina y tampoco soluble en agua. Digitaleína amorfa y digitonina son los dos glucósidos restantes, este último a diferencia de los tres primeros, es un depresor cardíaco. Otros elementos que se encuentran son aceite volátil, grasa, almidón, azúcar, etc.

USOS
La dedalera o digitalis se usa desde tiempos remotos como una droga estimulante cardiaca.  Los principios químicos activos encontrados principalmente en sus hojas incrementan la actividad de todo el tejido muscular pero especialmente el cardiaco y arterial con una enorme incidencia en el sistema circulatorio. La primera consecuencia de la absorción de estos constituyentes es la contracción del corazón y las arterias produciendo una subida grande de la presión arterial.

Esta planta también es altamente diurética.

Por su belleza y variado colorido su uso como planta de jardín es muy popular. Por su altura se recomienda para fondos dramáticos, recordando que la vara floral se produce recién en el segundo año. Es una planta muy amarga y de fuerte olor por lo que es muy poco probable que sea ingerida accidentalmente por un niño o por algún animal doméstico.

CONTRAINDICACIONES:
MUY VENENOSA, PUEDE CAUSAR LA MUERTE
La dosis administrada puede resultar una medicina o un veneno: diez gramos de una hoja de Digital puede causar la muerte a un adulto. A los pocos minutos de su ingesta se producen severas arritmias cardiacas, la actividad del sistema nervioso simpático queda inhibida y el corazón reduce drásticamente su latido y presión arterial, como consecuencia se alcanza la muerte súbita por paro cardiaco.

 

Marie Arana, copyright de Trilogía Herbarium, 1988.