Categoría: Verano

Este fin de año fue maravillosamente intensivo, preparando la casa para la Navidad, en la que después de cinco años (entre lejanías y pandemia) nos volveríamos a reunir toda la familia a celebrar las fiestas y luego en enero mi décimo septenio. Que alegría es cocinar juntos, entre risas, recuerdos y recetas compartidas y mejoradas. Tanto mejor si se hace con el producto recién cosechado de la huerta.

En la semana entre Año Nuevo y mi cumpleaños, trabajamos en el jardín en cuadrilla, limpiando, podando, cosechando, regando mientras conversábamos de todo y de nada, y a veces en silencio con las plantas y árboles. Al atardecer la terraza nos regalaba su sombra y frescor mientras seguíamos con la cháchara calmada entre el zumbido de los abejorros y el comienzo del concierto de los grillos con la luna casi llena. Verano.

Ahora con la casa nuevamente vacía, vuelvo a planificar la huerta de lo que queda del verano, pero ya pensando en la del otoño y en los cursos de este año en el Herbarium que pronto anunciaremos en nuestras RRSS.

Que sea un año productivo en todo y para todos. Que convivamos más estrechamente con nuestros maestros los árboles, las plantas. Que el Taita nos mande agüita y que sepamos cuidarla como lo sagrado que es. Que podamos cultivar nuestro alimento y medicina y tener un sistema inmune fuerte y activo. Amen. Asi sea, así será.

¡Mi lista de pendientes más larga que nunca! y que debo combinar con la vida diaria y el trabajo, que hace que desee un día de 48 horas y un cuerpo que lo resista.

¡Mi lista de pendientes más larga que nunca! y que debo combinar con la vida diaria y el trabajo, que hace que desee un día de 48 horas y un cuerpo que lo resista.