EL AGUA EN EL JARDIN

Tengo una garza que me visita todos los años. Atraída por las carpas koi del estanque, nos asombra a todos con su escultural silueta y pausado vuelo. A veces viene en pareja y es doble el placer de verlas paradas en la orilla de la lagunita que tenemos en la huerta o a la vera del tranque donde es mayor su pesca.
El agua en el jardín es vida. Los guarisapos y ranas, los peces, las elegantes libélulas, las mariposas, las golondrinas, tordos y tortolitas que vienen a beber, son un deleite de observar para grandes y chicos. No es difícil tener un jardín acuático, puede ser una fuente pequeña o un espejo de agua, servirá para atraer muchos visitantes gratos al jardín. Servirá también para refrescar el ambiente y si tiene movimiento, su murmullo nos dará una sensación de bienestar y paz muy grata.
La flora del jardín acuático es muy variada y hermosa. Será conveniente para un buen manejo del estanque el tener en consideración algunas variedades importantes de plantas acuáticas: las oxigenantes, las flotantes, las sumergidas, las de superficie y las de margen. El tener un balance de todas las variedades nos dará un agua transparente y un estanque prácticamente auto sustentable. Las dos primeras serán de suma importancia para empezar a poblar nuestro nuevo jardín; ellas controlarán el crecimiento de algas de dos formas: las plantas flotantes reducirán la cantidad de luz y entre sus raíces y tallos alojarán los peces, los renacuajos y los huevos de luciérnagas y libélulas. Los deshechos de estos habitantes del jardín acuático, servirán a su vez de alimento para las plantas creando un círculo maravilloso de subsistencia. Las plantas oxigenantes absorberán las sales minerales disminuyendo de esta forma el alimento que necesita el alga para reproducirse y controlándola. Las plantas acuáticas deberán cubrir ojala las dos terceras partes del estanque para que este tenga un buen balance y un agua clara.
¿Cómo se “planta” un jardín acuático? Dependiendo del tamaño y profundidad del estanque habrá que escoger las variedades a plantar. Las plantas flotantes como el jacinto acuático (Eichhornia crassipe), pistia (Pistia stratoides), lenteja de agua (Lemna gibba o minor) se pueden incorporar sin mas trabajo que un traslado cuidadoso. Las sumergidas como los nenúfares (Nymphaea), calas (Zantedeschia), irises (Iris pseudacorus, Iris kaempferi) deberán ser ancladas dentro de un pan de tierra contenido, es decir en una bolsa, tiesto o canasto plástico que permita que la tierra absorba el agua pero no se desarme el cepellón. Como plantas de márgen recomiendo las hostas, las mentas, las nalcas, los helechos, los juncos, las totoras, las thypas. Prácticamente todas las mencionadas sobreviven el invierno de la zona central y el calor del verano también. La mejor época para plantar un jardín acuático será el otoño, para dar un ambiente amable donde la planta se establezca y arme un buen cepellón de raíces antes del verano. También el otoño será el mejor momento para limpiar el estanque (aproximadamente una vez cada dos años), vaciándolo pero guardando un par de baldes del agua sucia para repoblar con ella el renovado ambiente del estanque y que vuelva a rehacerse el equilibrio vital para todos los habitantes de este universo. Incluida la garza.
Por Marie Arana-Urioste