Con la llegada de noviembre empiezan los planes para el veraneo. Una mirada al jardín de la casa de playa, campo o montaña nos indicará con premura lo que habrá que hacer ahora para disfrutarlo después. Diciembre será nuevamente un mes de locura en el que poco o ningún tiempo tendremos para dedicar a este jardín estival. El jardín ha estado “durmiendo” durante el invierno y seguramente está cubierto de maleza, las plantas importantes sin podar, el suelo desgastado, los muebles descascarados, en fin, miles de detalles que si empezamos a ordenarlos ahora, harán nuestro veraneo más placentero y descansado.

“Des-cubrir” las plantas madres implica literalmente  sacar primero que nada todas las malezas que durante la primavera crecen muy rápidamente. Si no podó sus rosas en el invierno, es un momento importante para hacerles una poda de orden, sacando todas las ramas secas y aquellas que se entrecruzan. Aproveche de sacar todo el crecimiento nuevo que va hacia adentro de la copa y de revisar las hojas por pulgones que pueden estar ya instalados “veraneando” antes que usted  en los brotes tiernos de sus plantas. Saque los pulgones con cuidado con una toalla de papel. De esta forma no matará a las chinitas que seguramente también están en su jardín alimentándose de estos pulgones y que son sus aliados para combatirlos durante todo el verano.

Otra poda importante que se puede hacer en este mes es la de limpieza de tallos florales. Si no ha trabajado últimamente en su jardín de vacaciones, tendrá que sacar los tallos florales secos de aloes y ágaves, de echiums, de lavanda, de paquerés y toda aquella planta que haya florecido durante el otoño, invierno y principios de la primavera. En algunas instancias esta poda estimulará una nueva floración, justo para cuando usted llegue a su lugar de veraneo, así que vale la pena el trabajo ahora. Si tiene en su jardín camelias, rododendros y azaleas, este es el momento para despuntar sacando la flor seca justo antes de que se forme la yema floral del año próximo. Este despunte no sólo hará que la planta se vea más ordenada si no que producirá un mayor crecimiento lateral.

Los riegos esporádicos  de un jardinero flojo que por no caminar pone el dedo en la manguera aumentando la presión del agua así como  la falta de labores culturales, compactan el suelo evitando que el agua penetre y la planta pueda absorber los nutrientes para crecer y desarrollarse. Hay entonces que picar la tierra alrededor, rehacer tazas de riego cuando fuera necesario y aplicar guano descompuesto. Luego de regar profusamente poner un mulch de piedras, hojas secas o papel de diario para evitar que de aquí a enero cuando lleguemos a gozar el jardín, hayan vuelto a desarrollarse las malezas. Entonces podremos retirar este mulch o incorporarlo al suelo si es biodegradable y la taza quedará lista y limpia.

Los muebles y adornos del jardín también necesitan mantención. Aproveche de sacar esa pintura suelta, lijar esos faroles y darles una mano de pintura y apretar goznes y tuercas para que queden firmes y bonitos. ¿Qué tal hacer un asado con la gente joven de la familia en el cual nos dediquemos a pintar de un nuevo color aquellos viejos muebles blancos? ¿Quizás verde cata? ¿O naranja fuego? ¿O lila lavanda? Atrévase a innovar. Una casa de verano, sea en la playa, la montaña o el campo, debe ser algo distinto, que nos alegre la vida, que nos rompa los esquemas de todo el año en la ciudad. ¡Disfrute!